Trend setters: LBD/LGD

Mademoiselle Coco inventó esta fantástica creación comodín.

Largo o corto, el LBD (little black dress) es el salvador perfecto de cualquier evento. Sabés que con invertir en la petite robe noire vas a amortizar.

El vestido negro no es un simple outfit. Podés arreglar el mismo para el día o la noche y para varios eventos, sin que nadie lo note.

Nadie va a decir «ayyy ese vestidito negro que siempre usás te queda divino», porque nadie va a notar que lo estás repitiendo. En cambio, sí lo harían con un vestido que llame mucho la atención.

Entonces, doblemente ideal. Invertí en un LBD, toda mujer debería tener uno.

Mirá cómo lo llevan ellas…

Rachel Zoe, estilista de los ricos y famosos, sabe qué se usa. Y cómo.

Para repetir estos vestidos, cambiar el sobre de color, probar con un cinturón de color para el día, o un tapado de piel para la noche.

 Jennifer Anniston cubre su vestidito negro con un tapado de Vivienne Westwood. Resalta el look, y puede repetir el vestido, sin usar el tapado, pero con un blazer negro o plateado.

 Emily VanCamp, la starlet de Everwood, luce un LBD con zapatos dorados. Su estilo simple no se compara con el vestido de McQueen que lleva Sandra Bullock. Los collares son los accesorios que complementan el look.

Para Kristin Cavallari y Nicky Hilton el LBD es ideal para el día. Podés lograr el look de la hermana de Paris, con un collar de tela.

La actriz de Laguna Beach, Kristin Cavallari, hace uso ampliamente de los LBD. Ya sea el modelo tipo camisa (arriba) o strapless para el día, con el it bag de Alexander Wang, y con plataformas para la noche.

 En las pasarelas del Loreal Fashion Fest Runway, los LBD hicieron furor. Es que este vestido es un must de todas las temporadas. Sueltos o con corsets, con medias o con piernas al descubierto.

Como Dakota Fanning, con un strapless y pumps a tono. Sin accesorios, la rubia adolescente refleja simpleza y elegancia.

Lejos de lo sencillo está Jennifer Love Hewitt, con un vestido negro de encaje. La diosa Demi Moore llega del brazo de su pareja Ashton Kutcher. Las chicas suspiran por él, pero admiran los looks de ella. Con este vestido negro que dibuja su figura, no necesita ni un detalle más.

Shanae Grimmes y Misha Barton con apretadísimos vestidos cortos. Las actrices de las exitosas series  90210 y The OC respectivamente se ven muy bien. ¿El logro? El calzado.

Kristen Bell, con un vestido de Monique Lhuillier, personalizado con encaje en los hombros. Shanae Grimmes, prefirió no repetir vestido negro, y lució un conjunto de falda con camisa, pero en sí, podría ser un vestido, no?

The LGD. 

Sí. Primero tuvo que existir el LBD para que luego llegara el Little Gold Dress, el vestido dorado.

Empezamos a verlo en la starlet Emma Watson, salida de la pantalla de Harry Potter atterrizó en decenas de marcas generando miles de páginas con su rostro. Empezó en Burberry (de allí el vestido) y no paró.

 La actriz Cate Blanchet no quiso quedar afuera de esta tendencia que nace de a poco, y lució un diseño de Alexander McQueen para la Premiere de su film The Curious Case of Benjamin Button. Por su parte, Lindsay Lohan no quiere que los flashe se le escapen. Así, con un vestido de flecos mostró su actitud más salvaje.

Kristen Bell con escotadísimo vestido dorado, y Vanesa Hudgens ultra corto. Ambas lo lucen muy bien, aunque el largo de Bell no es el ideal, un cm más arriba o dos más abajo, pero en el medio de la rodilla? No se ve tan bien.

Excenta de la moda, los flashes y un poco de la música también, Britney Spears eligió un LWD. Sí, adivinaste. Ni negro ni dorado. Blanco.

Un estilo que va bien de día como de noche. Podés levantar este look con stilettos negros y un abrigo de piel, dejando de lado el maxi bolso y llevando un clutch metálico.

La tendencia a segui, el LSD. No. No es un televisor, no es una droga. Es el Little Sequined Dress.

Nicky Hilton, con sequins plateadas, en un vestido modelo saco sastre. En Argentina conseguís los conjuntos sequined en Paula, Desiderata, entre otros.