Inspirado en el Cristobal Balenciaga de los ’50 y ’60, Alexander Wang mantuvo una paleta de blanco y negro que es su signature, para crear sus primeros looks como Director Creativo de la casa Balenciaga, luego de la abrupta (e inesperada) salida de Nicolas Ghesquière.
Los diseños en la casa Balenciaga, bajo la tutela Ghesquière, venían escalando en la paleta cromática con estallidos de modernismo y futurimo. Ahora, Wang baja a tierra redefiniendo la marca con aires couture, bien redondeado, aunque el modernismo aún podía sentirse en algunas prendas. “I wanted to begin by going back to the roots of the house,” dijo Wang. Y se tradujo en cada prenda.
Pantalones cigarette se combinaron con blusas de piqué, faldas plisadas, vestidos con sutiles peplums y una estructura casi arquitectónica.
En general, la colección se despega de los looks streetsmart de la marca Alexander Wang y sorprende el diseñador Alexander Wang con una colección impresionante.