Natalie Portman es una actriz bien versatil. Que se robó nuestro corazón como la Princesa Padme en Star Wars I,II y III, que nos conquistó como Alice en Closer, o Leslie en My blueberry nights y nos enterneció como Inés y Alicia en Goya’s Gohst. Pero que supo demostrar su fuerza en V for Vendetta y como la histórica Anne Boleyn en The Other Boleyn Girl.
Sin embargo el papel que le valió el Oscar fue el de Nina Sayers, una joven bailarina que vive con su controladora y obsesiva madre, y cuyo sueño es ser la estrella principal del Lago de los Cisnes. En este thriller psicológico dirigido por Darren Aronofsky, Nina se ve atrapada en una red de intrigas, mentiras y fuerte competencia entre ella y la nueva bailrina, una relajada y fresca Mila Kunis.
«I had the strangest dream last night…» comienza a relatar Portman a su madre. Es que las primeras imágenes que aparecen en pantalla es una bailarina impecablemente vestida de rosa que intenta escapar de un monstruo de negro. Y así, una y cada una de las escenas del film es una constante prueba para Nina y el espectador, quien estará dudando si lo que ve es real o resultado de la viva imaginación de Nina.
A lo largo de todo el film, los trajes de bailarina fueron diseñador por las hermanas Mulleavy, de la casa Rodarte. Y cada uno de ellos vale la pena ser destacados. Tutús en tul y sedas, con detalles en pedrería en blanco y en negro, y esos maravillosos tocados en plumas, se complementan con make up teatral de MAC Cosmetics para dar una creciente imágen de Nina y su Lago de los Cisnes.
Podés ver una galería de imágenes, cortesía de Fox Searchlight Pictures.
