Entonces llegó la primavera. ¿Llegó? El calorcito todavía se hace desear, pero las colecciones ya están en la vidriera y los desfiles internacionales de la temporada mas alegre vinieron y se fueron.
Y, como siempre, resumimos: el color de la temporada, el estampado y las tendencias.
¡Quiero unas calzas con flores! – exclama demandante, casi frenética, mi vecina de escritorio en el trabajo. No me había dado cuenta, y sigilosamente se convirtieron en uno de los must-have de esta temporada.
«Florals, for Spring, ground breaking», diría Miranda Priestly, mi personaje favorito de The Devil Wears Prada. Y muy a su pesar, las flores en temporadas estivales siguen siendo una constante en el mundo de la moda. Las vimos en las colecciones de Dries Van Noten(foto), Dolce & Gabanna, e incluso en el laberinto de Chanel y sorprendieron para la temporada Fall de Christian Dior Couture (foto home).
Y acá están, las veo en las calzas que se compró y luce (feliz) mi compañera de escritorio, en vestidos, faldas, remeras y camisas. Las recuerdo en cardigans de la temporada pasada, en la colección que marcó el regreso a mi placard de Paula Cahen D’Anvers.
Yo todavía les tengo cierto respeto (¿temor?). Por ahora no se filtraron por mis cajones, pero en solo unos meses vienen a invadirme cuando las tenga que llevar nada menos que en mis manos camino al altar. Resistirse es inútil. ¿Hortensias? El tiempo lo dirá.